Liverpool intentará recuperarse en casa tras la sorpresiva derrota por 3-2 ante Fulham en su último encuentro, un tropiezo que complicó su lucha por el título. A pesar del revés, los dirigidos por Jürgen Klopp mantienen un gran desempeño en la temporada, con 22 victorias en 31 partidos, siendo uno de los equipos más sólidos tanto en ataque como en defensa. Han anotado 72 goles y recibido 30, lo que refleja su capacidad ofensiva y el orden que suelen mostrar en la zaga, especialmente en Anfield, donde suelen imponer condiciones.
West Ham llega a este compromiso con la intención de mejorar su rendimiento tras el empate 2-2 ante Bournemouth en su última presentación. El equipo dirigido por David Moyes ha mostrado irregularidad a lo largo de la temporada, con solo nueve victorias en 31 partidos disputados. Con 35 goles a favor y 52 en contra, los “Hammers” han tenido dificultades para mantener la solidez defensiva, lo que podría jugar en su contra frente a un rival tan ofensivo como Liverpool. Aun así, buscarán sorprender y seguir sumando puntos que les permitan escalar posiciones en la tabla.