Girona afronta este nuevo compromiso con la intención de recuperar terreno tras haber igualado su último duelo ante Leganés, acumulando un total de nueve victorias en 33 fechas disputadas en la temporada, con una diferencia negativa en goles tras anotar 40 y recibir 52; en condición de local, ha logrado imponerse en solo seis de los 16 partidos jugados, cayendo en siete y empatando tres, lo que evidencia una irregularidad que podría condicionar sus aspiraciones, por lo que deberá mostrar solidez y determinación si quiere volver al triunfo.
Mallorca llega a este encuentro con el objetivo de recomponerse tras la ajustada derrota por 1-0 ante Barcelona, y aunque el revés dolió, el equipo ha demostrado ser competitivo a lo largo de la temporada, sumando 12 victorias en 33 jornadas con un registro de 31 goles a favor y 38 en contra; como visitante ha logrado seis triunfos y dos empates en 16 salidas, mostrando solidez fuera de casa que podría ser clave para intentar sumar ante un Girona que ha sido irregular en su estadio.
