Santos atraviesa una racha negativa que preocupa, acumulando cinco derrotas consecutivas, incluyendo la más reciente ante Pumas por 2-0. El equipo lagunero no ha logrado encontrar el equilibrio necesario entre defensa y ataque, mostrando vulnerabilidades en ambos frentes. Aunque jugar en casa podría ofrecer un impulso anímico, la presión por los malos resultados podría afectar su orden táctico. Este escenario abre la posibilidad de un partido dinámico y con espacios en ambas áreas, ya que Santos buscará revertir su mala racha, aunque con el riesgo de dejar huecos al contragolpe.
Tijuana, por su parte, ha mostrado un cierre de torneo más sólido y competitivo, logrando tres victorias en sus últimos cinco encuentros, incluyendo un triunfo importante por 0-2 como visitante ante Mazatlán en la jornada anterior. Los “Xolos” han demostrado eficacia ofensiva fuera de casa, lo cual puede representar una ventaja frente a un rival con serias falencias defensivas. Sin embargo, también han concedido goles con regularidad, reflejando cierta fragilidad en su zona defensiva, lo que podría derivar en un encuentro de ida y vuelta, con oportunidades para ambos equipos.